lunes, 30 de octubre de 2017

THOR: RAGNAROK, a space comedy.

Dir: Taika Waititi (2017)


Dale al Play y disfruta leyendo:


       El último engaño de Loki va a desencadenar unas consecuencias devastadoras para Thor y Asgard y a las que Thor deberá hacer frente convenientemente acompañado.



          Los prolegomenos de la película dan la impresión de simplemente estar asistiendo al siguiente episodio de la saga. Los colores, la localización y el tono así lo insinúan. Pero entra en escena el primer dialogo de la película y notamos que algo ha cambiado. Thor tiene chispa. Se muestra socarron. La cosa tiene gracia... y entonces empieza a sonar el Inmigrant Song de Led Zeppelin y se nos revela al asgardiano como nunca antes lo hemos visto....
Bienvenidos a Thor 3.0


          Desde que se anunció la incorporación de Taika Waititi como director de esta nueva entrega de Thor tuve bien claro que el tono iba a cambiar a algo más ligero y cómico pues dicho director había destacado tanto por sus labores tras y delante de la cámara con esa comedia llamada "Lo que hacemos en las sombras". De pensarlo a verlo en pantalla hay un gran trecho y nunca pensé que el cambio que este director ejercería sobre la franquicia del asgardiano fuera a ser tan grande como ha acabado siendo.


         Thor: Ragnarok se podría haber llamado Thor:Revolution. Taika ha cogido la franquicia y, no es que le haya dado un lavado de cara sino más bien, la ha sumergido en lejía concentrada y luego la ha pasado por un anuncio de Skittles para que se le impregnen todos los colores del arcoiris.


           Las cosas claras; Ragnarok me ha resultado una completa delicia. Si amigo lector de cómics. Lo siento si te molesta. Si Taika no ha sido respetuoso con el canon ni con la esencia del personaje, ni con los demás personajes que aparecen en escena. Lo siento por ti, ya que, y esto lo respeto, has crecido leyendo unas historias que no ves reflejadas en pantalla. Pero aquí soy sincero conmigo mismo y me pregunto si lo que he visto en pantalla funciona como película. ¿Es así? ¿Tiene vida propia o necesita del fondo escrito para poder ser entendido plenamente como ocurre en muchas de las películas "Highlights" de la saga Harry Potter? Y la respuesta es que la criatura está viva. Viva y con más fuerza que nunca.


           No nos vengamos a quejar ahora ni a desgarrarnos las vestiduras  cuando llevamos varios años repitiendo la cantinela de que este Thor no tiene carisma y parece que tiene un palo metido por el... ano (del demonio). El personaje y las películas de Thor necesitaban un revulsivo para trascender y ese revulsivo ha llegado. Puede ser doloroso para muchos de vosotros pero para este que escribe ha sido una completa delicia.


         Ragnarok es un festival psicodélico lleno de colores que impregnan cada plano y le dan un dinamismo y vitalidad increíble a la película. A esto hay que unir que Waititi sabe como manejar el humor y lo deja cabalgar libremente a través de los fotogramas sin dejar títere con cabeza. Un humor a veces pueril, payaso y la mayoría de las veces socarrón, (muchos dirán que excesivo), que podréis comprobar que engarza muy estrechamente con el visto en Guardianes de la Galaxia y he aquí, la principal referencia por la que os podéis orientar a la hora de hablar de Ragnarok. El héroe solitario marcado por la tragedia shakespiriana ha muerto. En su lugar ha renacido un producto que es pura Space Opera cuasi delirante en algunos tramos y bastante gamberra que se beneficia de un ritmo imparable. 


          No hay lugar para el aburrimiento en esta tercera entrega del semi dios. La diversión te atrapa desde el primer momento. Ya he mencionado el tema colores,  pues gracias a la esplendida fotografía de Javier Aguirresarobe y en conjunción con un CGI muy pulido esto se convierte en un festival carnavalesco muy bien matizado. Pero es que además todo el conjunto desprende un descarado espíritu ochentero que intenta mimetizar ese mundo de las recreativas a través de sonidos electrónicos y una divertida  banda sonora a cargo de Mark Mothersbaugh que, sin ser nada del otro mundo, en conjunción con las imágenes funciona en perfecta sincronía dando rienda suelta a los sintetizadores. 


          Decidlo bien claro: Thor y Thor el mundo oscuro simplemente cumplían la papeleta. Venían a rellenar el hueco necesario para dar consistencia a este universo compartido que Marvel ha tenido a bien parir. Pero si las quitáis de la ecuación parece ser que poco importan y quedaban como las hermanas menores de la casa. Es cierto que parece que Marvel está mutando hacía este espectáculo palomitero e intrascendente de carácter light y espíritu sinvergüenza.  No lo discutiré jamás de los jamases. Pero claro está, ya en términos globales para tomarnos las cosas en serio tenemos los dramas o la visión de la DC sobre el universo superheróico. 


          En Thor: Ragnarok el mundo que conocíamos vuelve a crecer y, lo mejor de todo, es que gracias a Guardianes de La Galaxia, aceptamos su crecimiento sin resistencia alguna. Es completamente consecuente con lo que nos han ido mostrando. La suspensión de la incredulidad ni siquiera entra en la ecuación del más versado. Todo es posible, así que la aparición de un Hulk por estos lares no desentona para nada y viene a reforzar una relación ya vista en Los Vengadores.


           Y ya que hablamos de apariciones debería aprovechar para hablar de la galería de personajes que desfilan alegremente por esta Ragnarok que nos ocupa y que no son pocos. Visto ya en escenas post créditos de la propia Doctor Strange tenemos a dicho personaje y a dicha secuencia nuevamente dentro de esta película. Nada casi nuevo que añadir. En cuanto a cameos tenemos tres muy divertidos y apareciendo conjuntamente con los rostros de Sam Neill, Matt Damon y uno de los hermanos Hemsworth. Por supuesto lo hay de Stan Lee.


          Y ya dentro del apartado principal podremos disfrutar de Anthony Hopkins e Idris Elba repitiendo en sus roles habituales siendo, por cierto, los únicos que no mutan hacia esta orientación cómica de la franquicia. Por supuesto tenemos a Chris Hemsworth retornando en el papel de un Thor que esta vez se gana a pulso al espectador como héroe de la función desde el primer momento. Muchos dirán que es una involución a peor pero simplemente es una jugada evolutiva que les va a funcionar gracias a su cinergia con el resto de personajes de la película. Vuelve Tom Hiddleston como Loki. Un poco raro su maquillaje y peluca pero el personaje más que ser gracioso sufre las gracias del resto.


         En cuanto a las nuevas incorporaciones tenemos a un Karl Urban con un personaje un tanto ambiguo que no estorba ni molesta, un Jeff Goldblum que cae simpático con un personaje completamente excéntrico como es el del Jefe Maestro, una Tessa Thompson experta en adoptar poses chulescas como Valkiria ( debo decir que no me ha terminado de convencer ), un Mark Ruffalo como Bruce Banner/Hulk que es otro de los must de esta película con su evolución pero al que se le presta la atención justa y por último pero no menos importante a una soberbia e imponente Cate Blanchett como la bella y mortal diosa de la muerte Hela. Un acierto de casting total y un placer para el espectador.

En definitiva, Thor:Ragnarok es comedia, es acción y es espectáculo.

La Nota de La Noche:



























1 comentario:

  1. Si vas a ver una película de superhéroes y esperas ver los mismo que en los cómics, mejor ahorrarte ese fastidio.
    Si analizamos Thor: Ragnarok como película fue un tremendo acierto. Buena banda sonora, excelente fotografía y el cast (que no ganará un Oscar ni mucho menos) estuvo a la altura de la situación. Si juntamos todo lo anterior, nos da como resultado un GRAN producto y concuerdo contigo en que no te aburres en ningún momento.

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