Dir: Ben Affleck (2016)
Joe Coughlin (Ben Affleck) debe poner en funcionamiento su red de distribución de alcohol en Florida durante la época de la Ley Seca viéndoselas con autoridades, competidores y el Ku Klux Klan.
Vivir de Noche tiene un comienzo un tanto errático, con esa voz en off poniéndote en situación y muchas imágenes de archivo. No es propio del Ben Affleck director y tampoco casa demasiado con el resto de la película pero por suerte es solo un prólogo.
Basada en la novela de Dennis Lehane el guión corre a cuenta del propio Affleck, que ya sabemos que tiene un Oscar y todo lo que ello conlleva, pero que en esta ocasión no anda todo lo acertado que suele estar en sus otras películas. El principal problema de esta Vivir de Noche es que le falta tensión. Garra. Le faltan esas escenas entre medias en las que se nos salga el corazón. Todo es demasiado monótono y, por ende, su duración de más de dos horas, se hace larga.
Para entendernos, parece como si Affleck estuviera muy comedido. De hecho la película es completamente elegante y, para ser un film dramático de gangsters, el rojo carmesí de la sangre se deja ver poco en pantalla. No parece el director ir en esa línea violenta, sino querer darle un toque glamuroso a todo el producto. Lamentablemente, como ya he dicho, la película peca de ser demasiado fría, no tira de los sentimientos como debería y, por ello, no deja poso tras ser vista.
La fotografía y banda sonora tienen también un toque clásico, cosa que es obvia dado el contexto que deben retratar. No diré que la película no merezca la pena ser vista. De hecho su acercamiento a la época de la ley seca saliendo de la tan manida Chicago y llevando la acción a Florida es un punto a su favor. Otro tanto para el reparto que, naturalmente, encabeza el propio Ben Affleck, pero que está secundado por actores de peso como Brendan Gleeson, Chris Cooper, Zoe Saldana, Elle Fanning o una cuasi irreconocible Sienna Miller.
La Nota de La Noche.
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