Dir:David Robert Mitchell (2015)
La adolescente Jay Height acaba siendo victima de una maldición tras un encuentro sexual. A partir de ese momento será siempre perseguida por un ente que puede adoptar la apariencia de cualquier persona, desconocida o familiar, no descansa y siempre irá tras ella buscando su muerte. La única manera de librarse de dicha presencia es volver a tener relaciones con otra persona y que esta no muera, pues si esto ocurre el ente volverá a por ella.
David Robert Mitchell nos trae una película escrita de su puño y letra en el que ahonda en el manido tema de las maldiciones de corte oriental pero consiguiendo darle un repunte de calidad gracias a una dirección que bebe mucho de estilos de rodar patentados por otros grandes directores.
Es cierto que realmente It Follows no es gran cosa, una historia muy sencilla, sin origen ni final en el que solo se desarrollan unas cuantas situaciones o set pieces pero que quedan magníficamente arropadas por unos encuadres y planos que nos recordarán inevitablemente a John Carpenter, Brian de Palma y hasta al mismo Stanley Kubrick. Mi primera impresión fue que la película tenía un marcado tempo y estética Carpenter pero trás un segundo visionado he podido claramente detectar la influencia de los anteriores directores en muchísimos fotogramas de esta película.
Por si eso fuera propia It Follows viene acompañada de una banda sonora netamente ochentera, cortesia de Rich Vreeland donde los sintetizadores y teclados campan a su aire libremente. Gracias al compendio de dirección artística, dirección y música se logra crear una atmósfera que poco a poco nos ira atrapando y conseguirá crearnos una sensación de angustia y asfixia en clara empatía con la protagonista, Maika Monroe, estupenda en su papel de desvalida victima de la película y que poco a poco irá renunciando a su inocencia con tal de sobrevivir; todo ello filmado con una exquisita elegancia donde lo psicológico tiene mucha más fuerza que lo meramente físico .
Olvidaos de sustos baratos y golpes sonoros para haceros saltar del sillón, It Follows es una película que destaca sobre la media por ser sincera consigo misma y darnos un film que, defraudará a más de uno por no ser netamente de terror y tener un ritmo más que lento, pero que gustará a amantes del cine bien rodado y con ganas de ver nuevos matices en cada nuevo visionado debido a todos los pequeños detalles que el director se permite ir dejando cual migas de pan.
Especialmente recomendada para amantes del cine ochentero.
La Nota de La Noche:
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